Severos y múltiples daños causados por el sismo del pasado miércoles 15, registra la ESFU 1. Mañana se determina cuando se reanudan las clases.

Uruapan, Mich.- Severos  y múltiples daños causados por el sismo del pasado miércoles 15, registra la ESFU 1. De por sí el plantel resultó afectado con pasados movimientos telúricos y aparte resiente la antigüedad del complejo educativo.  

Desde ese día el inmueble fue clausurado, las clases se han suspendido hasta nuevo aviso y este miércoles 22 se dará a conocer el opertivo para reanudar los cursos. 

Así lo informó el director de Servicios Regionales de la Secretaría de Educación en el Estado, Arturo García Galván.

Pero hay otro peligro.  Se trata de árboles de hasta 200 años, de antiguedad, que podrían constituir un riesgo. Por ello los evaluarán las autoridades ambientales del estado, reveló también García Galván.

Evocó el entrevistado que el año pasado en septiembre quedó dañado el edificio A o edificio principal, lo cual comprometía la integridad  fisica de los 985 alumnos y 56 profesores, por lo cual se clausuró.

El pasado miércoles 22 se causó daño estructural a un edificio construido hace ocho años en donde se imparten clases a los alumnos de tercer grado.

La semana pasada, también hubo afectaciones considerables en  el edificio de tecnología o edificio C; en la barda perimetral, en donde construcciones clandestinas de la parte oriente del plantel, recargaron peso excesivo en la tapia y en varias propiedades particulares, lo cual se agudizó con el sismo. 

La clausura del edificio será temporal hasta tanto se determine la viabilidad de retormar los cursos.

Por lo que toca a los árboles, hay algunos que constituyen una amenaza para los estudiantes , profesores y edificios.

Como se recordará la secundaria más antigüa de Uruapan se localiza en el cerro, en terrenos boscosos.

Por ello las autoridades ambientales tendrán que realizar un estudio para diagnosticar el riesgo, ya que se debe determinar cuál será el tratamento recomendado para los árboles, algunos de los cuales tienen más de 200 años.

Lamentablemente es posible que algunos deban ser podados, pero otros podrían tener que ser derribados, en caso de que estén huecos, plagados o fracturados.